El derecho a la información de los aragoneses y un mínimo código deontológico debería hacer reflexionar a la redactora de las noticias que ha publicado sobre las repercusiones de la anulación del P.G.O.U. de Montanuy.
Los datos que publica de este plan son sencillamente falsos. De las dos jóvenes que salen en las fotos son: una concejal del PSOE liberada en un ayuntamiento con 209 personas con un sueldo de 30.000 € anuales y la otra es también concejal del PSOE, hija del anterior alcalde y nieta del anterior alcalde franquista.
Alguien puede pensar que en estas familias que han regido los destinos del valle durante tantos años, también han podido tener alguna responsabilidad en la despoblación, en la perdida de la riqueza ganadera,...... e incluso en el espejismo de contratar a Norman Foster para que diseñara una estación de esquí a todo trapo.
En fin,... el oficio de informar es más serio y más difícil que escribir lo justo y necesario para que el dueño del periódico se quede contento.
