Siguiendo
con la información de la anterior entrada respeto a la solicitud de
Autorización de un gran número de proyectos de megacentrales eólicas y grandes
líneas eléctricas en la que se incluye una nueva Autopista Eléctrica que
debería terminar su trazado en la localidad de Isona, aportamos el escrito de
alegaciones simplificado que nuestros compañeros de la Plataforma Unitaria
contra la Autopista Eléctrica han redactado.
El macroproyecto ignora deliberadamente el rechazo histórico del territorio a este tipo de infraestructura y es producto de un modelo energético inadecuado y antidemocrático, que obra en contra de la necesaria transición ecológica, obvia la situación de crisis energética en la que nos adentramos y perjudicará gravemente a la resiliencia del sistema eléctrico. Es más, resulta doloroso y hasta ofensivo que este se justifique como poco menos que imprescindible para la urgente y necesaria transición ecológica, cuando, simplemente, repite un modelo extractivista y desvertebrador, que sacrifica unos territorios en beneficio de otros y causaría graves daños a la excepcional biodiversidad y calidad medioambiental del territorio afectado. Obviamente, no es posible definir como “ecológica” una transición que se base en macro proyectos como este; pero, además, en modo alguno podrá calificarse como socialmente justa y sostenible una transición energética que, en el actual contexto de crisis climática y energética, dilapida recursos y materiales estratégicos y se sustenta en grandes LAAT, ineficientes, por la pérdida de una parte significativa de la energía transportada, y en modo alguno adecuadas para un futuro próximo que exige aumentar la resiliencia del sistema. Además, el promotor ignora deliberadamente la larga lucha, de tres décadas de duración, del territorio afectado en la zona prepirenaica contra este tipo de infraestructuras de transporte eléctrico, un rechazo social tan incuestionable que, incluso, se ha reflejado explícitamente (en relación con el antiguo proyecto de LAAT Peñalba-Arnero-Isona) en la Planificación Energética 2021-2026, y que ha motivado en el pasado el rechazo de las instituciones aragonesas o la moción aprobada por el Parlament de Catalunya en febrero de 2016, instando al entonces Ministerio de Industria, Energía y Turismo a paralizar la construcción de nuevas LAAT a 400 kV en Cataluña.
Esta acelerada realidad que el oligopolio energético pretende imponer en un vergonzoso proceso de lavado verde de su objetivo especulador, merece una respuesta ciudadana que desde la plataforma ALIENTE se pretende recoger en la Puerta del Sol de Madrid el próximo día 16 de octubre.
